COMENTARIOS DE ELEISON DCCXXIX – 3 de julio de 2021
Dios está en el centro
¿Cómo es que miles de millones de ciudadanos en todo el mundo tienen tan poco sentido común que están siendo engañados por la serie de mentiras sobre el Covid? Pero ¿cómo pueden tragar sin estremecerse esta avalancha de patrañas que oscurecen sus mentes, para someterse dócilmente a esta multitud de estupideces tiránicas que los adormecen y embrutecen? ¿Cómo es todo esto posible? Solo tengo una respuesta para dar: se dejaron dominar por la "ciencia", por la tecnología, finalmente por la electrónica, para instalarse en una fantasía global donde su sentido común estaba tan erosionado que ya no saben discernir entre la realidad y el fraude actual que prolifera a escala planetaria, o resistir a los tiranos globalistas.
Tenemos aquí un anticipo de lo que dijo San Pablo sobre la venida del Anticristo: "Entonces se manifestarán los impíos a quienes el Señor Jesús exterminará con el soplo de su boca y aniquilará con el resplandor de su A su venida, ese impío será por el poder de Satanás con toda clase de milagros y señales y prodigios engañosos, con todas las tentaciones de la iniquidad, a los que perecen, porque no han abierto sus corazones al amor de la verdad que los hubiera salvado. Es por esto que Dios les enviará un poder de error que les hará creer una mentira, de modo que todos aquellos que hayan rehusado su fe en la verdad y se hayan complacido, por el contrario, en la injusticia, serán condenados.” ( II Tes.II, 8-12).
Este texto sigue siendo cierto en todo momento y en todo lugar, pero adquiere todo su significado a medida que nos acercamos al fin del mundo. Se notará, al comienzo de la cita, una falta de amor por la verdad. ¿Hay mayor don de Dios que amar la verdad y perseguirla? Porque persiguiéndola, la encontramos (Mt VII, 7-8), y si persistimos en nuestra búsqueda, Dios recompensa esta fidelidad abriendo el Cielo, proveyéndonos de la bienaventuranza eterna, nada menos. Pero si se prefiere el amor al mundo, a la carne y al demonio, estos tres grandes enemigos del alma, entonces se rehúsa la verdad, o por lo menos se rehúsa a buscarla. Sin embargo, esta falta de verdad en la mente solo puede abrir la puerta al error: el sentido común se erosiona; la voluntad está abierta a la corrupción y la inmoralidad. En efecto, el sentido común es ese don natural con el que Dios dota al espíritu de cada hombre, permitiéndole captar la verdad de la realidad que le rodea, para que aprenda a sobrevivir. Pero si busco imponer mi propia voluntad sobre la realidad y la verdad, como ciertamente puedo decidir hacer, entonces Dios permitirá que el sentido común con el que he sido dotado se erosione hasta el punto en que ya no signifique nada para mí. .
Esto es lo que está sucediendo ahora. En todo el mundo, los "intelectuales", que se cuentan entre los hombres más prestigiosos, se transforman sin embargo en los más estúpidos. Por ejemplo, algunos se niegan a reconocer los múltiples signos que indican la complementariedad de la diferencia entre el hombre y la mujer. Sin embargo, prefieren su propio esquema, al imponer a la Creación una igualdad imaginaria que no corresponde en absoluto a la concepción divina de la variedad que se expresa en la desigualdad. Se esfuerzan por convertir a los hombres en mujeres y a las mujeres en hombres, con consecuencias desastrosas para ambos, así como para los niños a los que obligan a someterse a cirugías catastróficas, para supuestamente convertir a los niños en niñas y a las niñas en niños. Pero, ¿qué puede impedir querer cambiar así la Creación, si Dios, la Creación, la Naturaleza, Adán y Eva, el Paraíso y el Infierno no son verdad y son sólo mitos? Sin esta verdad, el mundo entero no es más que un juguete, o un patio de recreo donde vendrán a jugar delincuentes como Gates, Soros, Schwab, etc.
Sin embargo, el único Dios verdadero, de quien derivan la Creación, la Naturaleza, Adán y Eva, el Cielo y el Infierno, sigue siendo el objetivo central de este fraude global covidiano. No es que el Creador del cielo y la tierra lo causara directamente, sino que ciertamente lo permitió. Por qué razón ? Ante todo, "para juzgar a todos los que no creyeron en la verdad y consintieron en la iniquidad". Porque ninguna mentira puede entrar al Cielo, mucho menos una avalancha de mentiras. Ahora, Dios quiere poblar su Cielo. Así que no importa cómo los hombres se esfuercen por despoblar
el mundo ?
Kyrie Eleison.